Conozca la historia de la ganadería El Colorado que logró duplicar la producción de leche utilizando las mismas vacas, implementando un correcto manejo y el programa de biolactoseguridad.
300 años de historia no son fáciles de cambiar. Más cuando de esa historia hacen parte cinco generaciones de una familia dedicada a la ganadería, donde primaba responsabilizar a la “vaca” dentro de un esquema de ganadería tradicional. Desde hace tan solo un año, la historia de la finca El Colorado, localizada en Simijacá, Cundinamarca, dio un giro inesperado de la mano de Marcela Giraldo Uribe, bisnieta de Joaquín Uribe, nieta de Alfredo Uribe e hija de Inés Uribe de Giraldo. El día en que estaba mostrando la finca para venderla, se dio cuenta del grave error que cometían y decidió junto con su papá y hermanos mantener el negocio y transformarlo en una agroindustria, lo cual han hecho dese ese momento de la mano con su esposo, José Ignacio Largacha. Hoy, tan solo un año después de esa decisión, El Colorado pasó de 700 litros de leche al día a 1.300 con las mismas 58 vacas. Producción a la que llegaría, a “paso de vaca”, según pronósticos de los que la conocían, en 5 años.
¿Cómo hicieron esta diseñadora industrial e ingeniero civil, hasta ese momento dedicados a la floricultura, para lograr cerrar esa brecha generacional y “voltear” el negocio para ponerlo a funcionar y tener rentabilidad? Invirtiendo en su gente, en sus praderas y, en sus vacas. Todo ello, claro, dejándose asesorar de expertos en cada renglón.
Antes de tomar el manejo total de la finca, cuenta Marcela, quinta generación de la familia, las vacas pastaban por las praderas, en una rotación de más de 60 días. No existían registros de rotación de potreros, aforos, animal por hectárea, litros libres de concentrado, registro de celos, protocolos, y no se invertía en medicamentos.
Recuerda que, cuando tomaron la finca, uno de los mayores problemas era: “Primero, novillas preñándose a los 30 meses, porque no daban el peso o no entraban en calor, teníamos días muy abiertos en el hato con un 30% vacío y con un horró del 18%; es decir, la finca estaba desbalanceada. Teníamos un levante del 45% y 55% en producción”. Fue entonces cuando decidieron buscar un acompañamiento técnico para cerrar esa brecha; acompañamiento que llegó de la mano de Julián González, Médico Veterinario y Técnico de la multinacional Bayer y dos de sus productos estrella: Catosal y Vigantol que hacen parte de la línea del Programa de Bayer Biolactoseguridad que busca, entre otras cosas, fidelización del cliente, el cual comprende tres aspectos principales: 1.) Control y detección de mastitis; 2.) Levante de terneras (desde el nacimiento hasta el primer parto), enfocados en la rentabilidad del negocio buscando su pronto y correcto desarrollo y; 3.) Fincas con buenas prácticas ganaderas y Bienestar Animal.
Catosal permite que el animal saque provecho de los nutrientes que está consumiendo, logrando una mejor producción .
Este programa lo que pretende es encontrar alianzas con ganaderos para mejorar la rentabilidad del negocio. Alianza que tiene claro Marcela pues cree que en la ganadería tradicional siempre se habla de “gastos” y no de “inversión”. “Con la ayuda de Bayer y sus productos Catosal y Vigantol hemos logrado cerrar una brecha en materia reproductiva que nos está generando agilidad y rentabilidad en el hato. Hay que ser muy juiciosos. Cada vez que se va hacer una transición se aplica Catosal y al nacer las terneras se les pone Vigantol, siguiendo unos protocolos claros”. Los resultados de esa inversión ya se ven reflejados, pues antes de entrar al Programa Bayer Biolactoseguridad, hace un año, el primer servicio en la finca era a los 30 meses de edad del ejemplar. Con la ayuda de Vigantol y Catosal actualmente están en 24 meses. La meta es llevarlas a los 18 meses, dice el Médico Veterinario Julián González, quien, agrega: “Desde que las terneras empiezan a lactar, se les suministra pequeñas dosis de Catosal (Complejo B12 + Fósforo Orgánico) lo que potencializa su actividad energética para lograr mejor desarrollo y que estén mejor preparadas al llegar a su primer servicio. La idea es servirlas a los 18 meses de edad para que lleguen al parto a los 27, con pesos ideales de 380 Kilos. Por su parte, Vigantol ayuda a subir los niveles de anticuerpos para que asimilen más las inmunoglubilinas y tengas mejores defensas. Así mismo, ayuda a prevenir la hipocalcemia o fiebre de leche. 15 días antes del parto se suministra a cada animal 20 ml Catosal y 5 ml de Vigantol, el día del parto 20 ml de Catosal y 15 días después del parto otros 20 ml de Catosal, para prevenir todo el tema de la transición que se pueda presentar de la etapa de peri-parto al post-parto. lo que ayuda a controlar la fijación de calcio muy presente en la zona del Valle de Ubaté y el altiplano cundi-boyacense.
Esto indica que están llegando a unos parámetros ideales dentro de la lógica funcional de una finca bien manejada, en tan solo un año. Año en las que se han presentado anécdotas como la sucedida con la empresa Semex, quienes los visitaron en junio de 2018 dándoles un diagnóstico poco favorable, sugiriendo que el esfuerzo de trabajo debía ser muy alto; es decir, no eran buenas las proyecciones. La clasificación quedó en 857 puntos. A los seis meses, volvieron, cuenta Marcela, y la pregunta que le hicieron fue: “¿Usted me cambió el hato? Tuvieron que volver a calificar el hato, y en junio de este año volvieron a visitarla y las mismas vacas recibieron un índice de 880 puntos; la conclusión nuevamente es que toda la selección que habían hecho de toros enfocados en alta producción de leche debe modificarse, pues el hato ya cuenta con vacas de 35 litros, en primero y segundo parto y, habían logrado una total expresión de su capacidad genética mediante el manejo de los protocolos y los cambios en alimentación.
La finca El Colorado tiene 100 hectáreas, de las cuales 25 están dedicadas a la lechería con vacas Holstein. Cuentan con pastos Kikuyo, Ray Grass y llevan rotación de 42 días con carga de 3.8 animales por hectárea. (Cómo duplicar la producción de leche con las mismas vacas)
Lo que le faltaba a la finca era una administración enfocada en las praderas “convertirnos en agricultores“. En este momento, debido a nuestras raíces como floricultores, hemos logrado llevar a la finca a una producción de pastos y a unos aforos que dan las necesidades alimenticias que tiene el ganado lo que nos ha dado la posibilidad para que las vacas expresen su capacidad productiva. ”La idea es producir más comida para producir más leche; siempre estamos en post de mejorar”.
Sus vecinos de la zona, se preguntan ¿cómo hizo para casi doblar la producción en tan solo un año? La respuesta de Marcela es sencilla: “Hay que invertir”.
Vigantol es un complejo de vitaminas liposaludables A, D y E que brinda una rápida absorción y biodisponibilidad. (Cómo duplicar la producción de leche con las mismas vacas)