A menudo una secuela de la retención de placenta es la metritis que es una inflamación del útero.
Síntomas de la metritis
Aumento del tamaño y grosor de la pared uterina, descargas vaginales color café rojizo, acuosa y maloliente (la descarga normal es color rosado, mucoso y sin olor). Pérdida del apetito y, disminución en la producción de leche.
Las vacas predispuestas con distocia, nacidos muertos, gemelos, retención de placenta, fiebre de leche y cetosis son más probables de tener metritis.
Tratamiento de la metritis
Bacterias, virus, hongos y protozoarios pueden crecer dentro del útero, lo que causa metritis y es un reto para su tratamiento dice Lauer.
Si la vaca tiene fiebre y mal olor, trate con antibióticos sistémicos. Excenel y Excede no se ocultan en leche, permitiendo a las vacas a permanecer en el mismo corral; sin embargo, existe retención en carne de cada producto. Polyflex puede usarse si se aprueba por el veterinario y tiene tanto retención en leche como en carne. La oxitetraciclina se oculta en leche y por largo tiempo (28 días) en carne.
Se pueden dar antinflamatorios si está presente la fiebre. La aspirina funciona sin quedarse en leche o carne. Si ya se está usando algún producto que deje rastro en carne o leche, el flunixin meglumina es una opción.
Otros tratamientos a considerar serían la oxitocina o prostaglandinas para contractar el útero o un lavado uterino o un producto para lavado uterino como el mencionado en la retención de placenta.
Prevención de la metritis
Mantenga a las vacas secas saludables y no sobre acondicionadas. Minimice la contaminación uterina. Mantenga a las vacas frescas comiendo; ofrézcales alfalfa de tallo largo sobre TMR. “No me interesa lo que coma, siempre que esté comiendo”, dice Lauer.