El virus de diarrea viral bovina VDVB se diagnosticó por primera vez en Colombia en 1975 en un lote de novillas Holstein importadas desde Holanda, que presentaron signos clínicos de la enfermedad. Desde entonces se han realizado múltiples aislamientos del VDVB en diferentes zonas del país. En 1996 se demostró por primera vez la presencia de animales persistentemente infectados en Colombia.
El virus de diarrea viral bovina es responsable de grandes pérdidas económicas en las explotaciones ganaderas de Colombia, ya que está asociado a diferentes manifestaciones reproductivas tales como: Infertilidad, pérdidas embrionarias, abortos, momificaciones, defectos congénitos y nacimiento de animales persistentemente infectados con el VDVB. Lo anterior ocasiona, un pobre desempeño reproductivo de los hatos y altas tasas de descarte.
Por otra parte causa problemas respiratorios principalmente en animales jóvenes y es un virus altamente inmunosupresor.
Transmisión
El virus de diarrea viral bovina es transmitido a través de secreciones nasales, orales, oculares, vaginales, fetos abortados, vía transplacentaria, utilización del mismo guante de palpación para diferentes vacas, moscas hematófagas, el uso de una sola aguja para inyectar varios animales, jeringas contaminadas, fómites y equipos endovenosos.
Formas clínicas de infección
El virus de diarrea viral bovina tiene diferentes formas de presentación, que dependen del estado inmune del hospedero y del hato, factores causantes de estrés, estatus reproductivo, edad gestacional del ganado preñado, (en caso de infección durante la gestación) y el biotipo de VDVB(NCp o Cp) infectante.
La infección clínica con el virus de diarrea viral bovina ocasiona diversos cuadros, dependiendo de los factores anteriormente mencionados. Se encuentran entonces, la infección aguda, la infección transplacentaria, que causa problemas de tipo reproductivo, cursando con abortos y/o anomalías congénitas en el ternero, la infección de tipo persistente y por último la forma más agresiva “enfermedad de las mucosas”.
Infección aguda
La severidad de la infección aguda es variable dependiendo del estatus inmune del hospedero, generalmente se presenta en terneros y cursa con fiebre y descarga nasal (infección respiratoria primaria). La infección aguda con el VDVB predispone a múltiples enfermedades debido al efecto inmunosupresor del virus, permitiendo de esta forma un aumento en la actividad del rota virus que ocasiona enteritis en terneros. También se ha comprobado que el VDVB tiene un efecto sinérgico con el Virus Sincitial Respiratorio Bovino y a su vez, el efecto inmunosupresor facilita la multiplicación de Mannheimia haemolytica, lo que predispone a la presentación de neumonías en terneros.
Infección transplacentaria
Este tipo de infección ocurre en vacas preñadas susceptibles a la infección con el virus de diarrea viral bovina. Las diferentes manifestaciones de la infección transplacentaria, dependen de la edad gestacional en la cual sucede la infección y el biotipo infectante (NCp o Cp):
Entre el día 0 a 40 de gestación:
El resultado podrá ser la muerte embrionaria temprana, afectando o no el intervalo entre celos.
Entre los días 40 a 120 de gestación:
En este periodo si la infección fetal ocurre con el biotipo NCp, se presentará un estado denominado “Ternero Persistentemente Infectado” (PI) el cual no es capaz de instaurar una respuesta inmune contra el VDVB, ya que el sistema inmunológico del feto en este periodo no es lo suficientemente maduro para reconocer al VDVBcomo extraño, siendo entonces reconocido como propio. En la mayoría de los casos, estos terneros PI al nacer presentan bajas tasas de crecimiento, deficiente desarrollo corporal y son más susceptibles a infecciones entéricas, neumonías y a desarrollar la manifestación clínica de Enfermedad de las Mucosas.
Los terneros PI son portadores permanentes del VDVB y por lo tanto eliminan grandes cantidades del mismo, a través de de secreciones como: Orina, saliva, heces y fluidos respiratorios.
En la mayoría de los casos los animales PImueren antes del destete, pero algunos de ellos (el 20% aproximadamente) pueden llegar a la edad adulta, convirtiéndose en un importante vector de transmisión del virus de diarrea viral bovina, no sólo por la eliminación constante del virus a través de secreciones; si no porque una vaca PI siempre dará origen a un ternero PI. Por su parte los toros PIdiseminarán de forma venérea la infección en el hato.
Entre los días 120 a 180 de gestación:
Si la infección se presenta en este estadío de la gestación, la vaca puede abortar o el ternero puede presentar anormalidades de tipo congénito tales como: Hipoplasia cerebelar, hidranencefalia, hidrocefalia, ceguera, cataratas, microftalmia, atrofia del nervio óptico, braquignatia, formación imperfecta de huesos entre otros.
Entre el día 180 al nacimiento:
El resultado será un ternero con apariencia saludable que por ser inmunocompetente al momento de la infección, puede presentar anticuerpos contra el VDVB al nacer y se conoce como congénitamente infectado.
Enfermedad de las mucosas:
Presenta altas tasas de mortalidad en animales entre los 6 y 24 meses de edad. Y se manifiesta con anorexia, fiebre, diarrea, pérdida de condición corporal, múltiples úlceras en el tracto gastrointestinal y muerte.
Diagnóstico
El diagnóstico deVDVB se hace basado en los casos clínicos que se presentan en la explotación. La prueba de ELISA es una herramienta que ayuda a identificar anticuerpos específicos contra el virus de diarrea viral bovina VDVB a través de la toma de muestras de sangre de forma individual. En algunas ocasiones la patología de los fetos abortados puede ser una herramienta útil para el diagnóstico de VDVB. Para la identificación de PI se utiliza la prueba de ELISA, captura de antígeno y PCR en suero.
Control y prevención
La principal meta para el control de VDVB en un hato es la prevención de la infección fetal, para disminuir el nacimiento de animales PI y congénitamente infectados, sin dejar a un lado el control de la enfermedad en todos los animales de la explotación.
El plan de control y prevención se pude dividir en dos partes: implementación de medidas de bioseguridad y de un programa de vacunación.
Bioseguridad: Para el control y prevención de virus de diarrea viral bovina VDVB es necesario establecer medidas estrictas de bioseguridad en el hato, tales como: Remoción de animales PI,compra de animales negativos o vacunados contra VDVB, realizar una cuarentena por 30 días de estos animales y aplicar la vacuna contra el VDVB durante el tiempo de aislamiento.
Asimismo hacen parte de las medidas de bioseguridad: mantener una adecuada higiene y desinfección rutinaria de las áreas de mayor riesgo de contaminación (establos, paritorios, embarcaderos etc.), evitar el contacto con ganado vecino, proteger a los animales preñados de posibles fuentes de infección principalmente durante el primer trimestre de gestación, utilización de semen de animales negativos a VDVB, desinfección correcta de los implementos utilizados para castraciones, descornes, vacunaciones, atención de partos, cirugías, entre otros. Además es importante tener en cuenta el estatus nutricional de la explotación, ya que éste es uno de los factores determinantes, para controlar cualquier enfermedad. Por otra parte se debe contar con un plan sanitario completo, el cual debe incluir: desparasitaciones, arreglo de pezuñas, y vacunaciones contra otras entidades.
Programa de Vacunación: El principal objetivo del programa de vacunación es prevenir la infección y proveer una adecuada inmunización de todos los animales. Para estoes importante elegir una vacuna con las siguientes características: Que brinde una adecuada protección fetal para controlar y disminuir el nacimiento de animales PI y congénitamente infectados, que confiera inmunidad celular y humoral y que provea una adecuada duración de la inmunidad.
Dentro de las estrategias se recomienda la vacunación con vacunas a virus vivo modificado, con la ventaja de generar una inmunidad más amplia (humoral y celular) y de requerir una sola dosis y posteriormente refuerzos anuales; o la utilización de vacunas inactivadas aplicando dos (2) dosis de vacuna a intervalos de 3 a 4 semanas y dosis de refuerzo anualmente o antes según el criterio del Médico Veterinario.